Narrativas personales, escrituras populares

Concepto

 

Los conceptos de escritura ordinaria y de narrativas personales son términos desarrollados por la historiografía de la lectura y se refieren especialmente a la cultura escrita de la gente común desde el Antiguo Régimen a la actualidad, y en concreto a los textos de las llamadas «clases subalternas», cuya producción escrita había sido poco tenida en cuenta, o solo en relación con algunas parcelas temáticas, como es todo lo referido a la literatura de cordel.

Por otro lado, la orientación de estos textos hacia usos muy personales, como ocurre con los libros de familia, los cuadernos escolares o las cartas de emigrantes, por citar algunos ejemplos, ha derivado hacia el concepto de egodocumento, es decir, textos que gravitan sobre intereses muy personalizados, como son un diario, una carta o unas memorias. Este concepto nos lleva, a su vez, a las llamadas historias de vida, memorias o autobiografías que, en el caso particular de profesiones como maestros, boticarios, inventores, o de sectores desfavorecidos, son de una gran riqueza etnográfica.

Los nuevos estudios culturales –la aproximación etnográfica, por ejemplo, a Internet y a la cultura contemporánea–, la investigación cualitativa, etc., todo ello ha hecho más borrosa la separación de géneros y de categorías, de modo que hoy el debate narrativo se ha hecho mucho más amplio e intermedial, pues la ficción recorre diferentes lenguajes y soportes. Hace falta indagar, pues, nuevas formas culturales y manifestaciones para poner en valor, tal como apunta G. Bombini (2008: 28), «la diversidad de escenas de lectura y de los distintos modos en que la cultura escrita se convierte en objeto de apropiación, pues apropiación también significa modos en que la sociedad propone procesos que jerarquizan, consagran o desacreditan bienes culturales».

El deslizamiento semántico ha sido notable: hoy no cabe entender espacios o lecturas apropiadas por su corrección moral o ideológica dentro de una sociedad multicultural y relativista. Hoy el concepto de «apropiación» se relaciona más con el de la asimilación o «in-corporación», al margen del canon letrado vigente y de las costumbres o lugares predeterminados (Bombini, 2008: 32). Las narrativas «in-corporadas» son el síntoma claro de una cultura participativa (Jenkins, 2005), donde todo el mundo quiere leer o contar historias que le conciernan, que le toquen de lleno, y no solo narraciones canónicas.

 

Análisis

 

De las prácticas históricas de la lectura al espacio rizomático de la cibercultura

Las prácticas históricas asociadas a la escritura en las clases populares no son muy conocidas, por ejemplo Petrucci (2000) llama la atención sobre la falta de investigaciones profundas de tipo cualitativo en relación con los productos escritos de los miembros de las clases subalternas de los siglos xViii y xix, como pueden ser firmas, cuentas, cartas, diarios, escrituras murales...

En el contexto histórico español esos productos han sido descritos por A. Castillo (2001) y otros expertos, presentando una gran complejidad y diversidad, lo cual contradice la preconcepción de un antagonismo absoluto entre la cultura letrada y la cultura popular, que ha sido rebatido a propósito del Quijote y otros casos notables. En este sentido, cabe destacar la tesis de A. Viñao Frago (2004) sobre la complementariedad entre cultura escrita y cultura oral, o la tesis de Margit Frenk (1997) sobre la impregnación de la oralidad en la lectura en tiempos de Cervantes, todo lo cual subraya el papel de la ósmosis entre dichos ámbitos.

La encrucijada actual de la cultura escrita es superar la dicotomía artificial y recuperar el mundo de la oralidad (en el sentido en que ya lo describía W. Ong, 1994), así como prestar atención a la convergencia de medios y a la cultura participativa (Jenkins, 2005), a la segmentación y fragmentación actuales (plataformas y redes sociales), que lleva a una diferenciación progresiva, para hacer un discurso que busque nuevas síntesis culturales. La cultura escrita de una comunidad aparece, pues, como un todo no siempre reconocible por parte de la misma.

En la actualidad, se perciben aspectos nuevos, como ocurre con las expresiones juveniles, cuando se observan nuevos cauces como las fan fics, y otros clásicos que cobran un nuevo valor, por ejemplo, el karaoke y la subrotulación en YouTube, como una forma de apropiarse de textos, imágenes y músicas de tradición clásica.

Lo específico de la idea de rizoma (Deleuze y Guattari, 1980) viene a subrayar el papel de una red acéfala, asimétrica, multilocal y, por supuesto, desjerarquizada, lo cual contrasta con la visión centralizada de la cultura, focalizada en centros hegemónicos asociados a estatus de privilegio. Ocurría con las metrópolis respecto a los países colonizados, pero ocurría igual en muchos otros ámbitos: la capital de provincias respecto a los pueblos, el centro respecto a los barrios, la enseñanza académica frente a las no académicas, eran los mismos polos que marcaban un elemento superior y otro inferior. Un espacio letrado influido por la cibercultura es por naturaleza híbrido y puede incorporar estas prácticas mixtas; por ejemplo, puede incorporar proyecciones manipuladas digitalmente o bien performances que empleen tecnología digital. Las escrituras nómadas de la era posletrada precisamente van en esta línea de usar soportes y espacios alternativos. Chartier (1994) traza una situación que explica en gran medida el fenómeno revolucionario francés: deterioro de las instancias de los poderes tradicionales y la toma de conciencia de una nueva mentalidad ciudadana, favorecida por la extensión de la alfabetización, la lectura y la cultura popular, que se contraponía al pensamiento del Estado, porque este no es rizomático, sino arbóreo, verticalista.

 

Implicaciones

 

La recuperación de la memoria cultural y los archivos del Seminario Interdisciplinar de Estudios sobre Cultura Escrita

Este ingente material forma un corpus que es urgente registrar, catalogar y facilitar su disponibilidad. A ello se ha dedicado el Grupo SIECE de la Universidad de Alcalá de Henares, dirigido por el profesor A. Castillo, tanto a través de estudios teóricos, como a través del Archivo de Escrituras Cotidianas SIECE, cuyos objetivos son la conservación, el estudio y la edición de los testimonios escritos de la gente común, especialmente aquellos que corren mayor riesgo de desaparecer; también la creación de materiales didácticos para su uso en la enseñanza secundaria y universitaria, en un intento de acercar la disciplina histórica a las generaciones más jóvenes. En el archivo se conservan documentos personales de los siglos xix y xx de muy diversa procedencia geográfica.

El fondo se compone de epistolarios y correspondencias personales (de tipo amoroso, escritas durante la guerra o estando en la cárcel), entre las que destacan las cartas de Pepita García de Rivas a su prima, que ameniza su escritura con deliciosos dibujos y caricaturas que conforman un auténtico retablo de costumbres de la época; las sesenta enviadas por Ramón Arteaga Calonge a sus padres durante sus años de estudiante de aviación en San Javier (Murcia); y las cartas de Maria de Souza-Pereira con Francisco de Mascarenhas Grade. Asimismo se custodia más de un centenar de tarjetas postales escritas en los lugares turísticos más apacibles o en cuarteles militares en plena guerra con Marruecos; memorias y diarios de guerra (Higinio Busons), y de infancia (Marcela Blas); libros de cuentas de propietarios rurales de las provincias de Madrid (Talamanca de Jarama y Valdetorres de Jarama) y de Guadalajara (El Cubillo de Uceda), algunos de ellos con un tiempo de escritura que abarca a más de una generación; agendas campesinas; libros de oficios; cuadernos, escritos y manuales escolares; cancioneros y poesías; recetarios; cuadernos de oraciones y álbumes de cromos.

Todo ello conforma un amplísimo material que sirve de modelo de lo que en cada entorno se podría recuperar, como una forma no solo de historiar la educación o la cultura del entorno, sino de reapropiarse de este material invisible a menudo y perecedero.

 

Un muestrario de prácticas y textos

 

En la Red AIEP de Archivos e Investigadores de la Cultura Popular, fundada en el año 2004, hay disponible una exposición virtual dividida en las secciones de Memoria cotidiana de la escritura, Escribir desde el pupitre, La escritura en el hogar y en el trabajo, En compañía de la escritura, Para el recuerdo no hay distancia, Letras desde la violencia, La escritura al hilo de la vida, preparadas por diversos especialistas y que tienen un gran valor etnográfico y educativo. Equivalen sin duda a las anotaciones y grafiti espontáneos de los blocs y carpetas escolares de adolescentes en la actualidad, y testimonian un hilo de continuidad entre las prácticas culturales adyacentes en los contextos escolares, y que hoy también están siendo puestas en valor, porque se refieren tanto a la escritura manuscrita sobre los citados materiales de clase, como a los blogs y otras manifestaciones de escritura electrónica.

 

 

También cabe destacar algunas iniciativas editoriales, como la publicación por la editorial Sendoa de una Biblioteca de Narrativa Popular, que ha alumbrado testimonios de personajes populares muy interesantes, y cuyos títulos son ya orientativos del enfoque de la colección: En la montaña de León, Entre los olivos de Jaén o En la ribera del Cares, los cuales nos ofrecen no solo un rico anecdotario, sino auténticas historias de vida protagonizadas por labriegos, pastores, posaderos, etc.

 

Referencias

 

Castillo Gómez, A. (2000), «“Hablen cartas y callen barbas”. Escritura y sociedad en el
Siglo de Oro», Historiar, 4, pp. 116-127.

Castillo Gómez, A. (2001), Cultura escrita y clases subalternas: una mirada española,
Oiartzun: Sendoa.

Castillo Gómez, A. y Monteagudo Robledo, J. I. (coords.) (2000), «Los archivos
europeos de la escritura popular», Archivamos, revista trimestral de la Asociación de
Archiveros, 38, 4.º trimestre, pp. 5-25, Castilla y León.

Castillo Gómez, A. y Montero García, F. (coords.) (2003), Franquismo y memoria
popular. Escrituras, voces y representaciones, Madrid: Siete Mares.

Chartier, R. (1994), El orden de los libros: lectores, autores, bibliotecas en Europa
entre los siglos xiv y xviii, prólogo de García Cárcel, R., trad. de Ackerman, V.,
Barcelona: Gedisa.

Deleuze, G. y Guattari, F. (1980), Capitalisme et Schizophrénie 2. Mille Plateaux,
Paris: Minuit.

Frenk, M. (1997), Entre la voz y el silencio. (La lectura en tiempos de Cervantes),
Alcalá de Henares: Centro de Estudios Cervantinos.

Ong, W., 1994; NO COINCIDEN FECHAS

Ong, W. (1982), Orality and Literacy: The Technologizing of the Word, New York:
Methuen; versión española: Ong, W. J. (1987), Oralidad y escritura, México: Fondo de
Cultura Económica.

Petrucci, A. (2000), «Escrituras marginales y escribientes subalternos», Signo. Revista
de Historia de la Cultura Escrita, n.º 7, pp. 67-75.

Viñao Frago, A. (2004), «Oralidad y escritura en el Quijote: ¿oposición o
interacción?»,Revista de Educación, número extraordinario 1 dedicado a «El Quijote y la educación ».

Fecha de ultima modificación: 2014-02-07